Es fácil pensar en una sonrisa brillante como el resultado principal del cuidado dental, pero existen muchos beneficios para la salud de todo el cuerpo que puede obtener de una consulta habitual al dentista.
Durante estos exámenes de rutina, el dentista no solo examinará los dientes, sino también las encías y la boca en general. Este examen le permitirá detectar problemas bucales como caries, bruxismo o enfermedad de las encías y recomendar planes de tratamiento para abordarlos.
Adicionalmente, mantener la boca saludable puede mejorar la salud en general. Nuestras bocas están llenas de bacterias (en su mayoría inofensivas) y mantenerlas bajo control al cepillarse y utilizar hilo dental a diario ayuda a reducir las probabilidades de contraer otras enfermedades, como ciertos tipos de cáncer y posiblemente la enfermedad de Alzheimer.
Normalmente se recomienda realizarse un control dental cada seis meses, pero ciertos problemas de salud podrían requerir consultas más frecuentes. Por ejemplo, la diabetes a menudo se relaciona con la enfermedad de las encías debido a los altos niveles de azúcar en sangre. El consumo frecuente de alcohol y tabaco están relacionados con una tasa más alta de pérdidas de dientes permanentes y enfermedades bucales. Los factores genéticos también importan; si hay antecedentes de enfermedades bucales en su familia, debería realizarse un control con más frecuencia.
La mayoría de los beneficios dentales cubrirán 1 o 2 controles preventivos por año, así como algunos otros servicios. Consulte su información de beneficios para conocer qué está cubierto. Asimismo, puede utilizar los fondos para los servicios dentales de su cuenta de ahorro y cuenta de gastos flexibles para la salud para mantener la sonrisa brillante y el cuerpo saludable.