Ir a trabajar para pagar el día de ayer en lugar del de mañana se ha convertido en la norma para la mayoría de los estadounidenses.
La deuda promedio declarada en 2023 por cada estadounidense fue de $103,215, y la deuda de vivienda encabezó la lista. Las compañías de tarjetas de crédito han aumentado la posibilidad de obtener lo que desea ahora con solo deslizar la tarjeta o con Apple Pay, y te puedes preocupar por ello más tarde. Sin embargo, aún es posible reducir la deuda y adoptar hábitos financieros saludables que pueden ayudarte a invertir para tu futuro y el de tu familia.

Ahorrar para el futuro
Invertir el dinero para las circunstancias desconocidas del mañana es importante. No solo se debe ahorrar para lo desconocido, sino también para cosas que puedas querer hacer, como comprar una casa o un automóvil, la jubilación, los gastos universitarios y las vacaciones. Puede ser difícil determinar cuánto ahorrar cada mes cuando los gastos pueden consumir la mayor parte de sus ingresos, pero comenzar de a poco es lo mejor. A medida que el presupuesto se vuelva más manejable, descubrirás que puede ahorrar más. Aquí hay algunos consejos más que se pueden poner en práctica:
- Comenzar con lo que se pueda: si solo se puede ahorrar $10 por mes, comenzar por ahí. A medida que pase el tiempo, aumenta el valor cada mes. No te castigues si debes dejar de ahorrar durante un mes o dos.
- Ahorrar dinero inesperado: hay veces en que recibimos dinero de cumpleaños, un cheque de bonificación en el trabajo, un buen reembolso de impuestos o vendemos algunos artículos por dinero en efectivo. Estos pueden usarse para ahorrar más, ya que no afectan el presupuesto mensual.
- Automatizar los ahorros: cada vez que se reciba un salario del trabajo, se puede asignar una parte automáticamente a los ahorros. Esto es útil porque no necesitarás establecer un recordatorio y no te sentirás tentado a tomar de tus ahorros.
- Revisar el presupuesto: a medida que se crea el presupuesto, es mejor realizar una auditoría para ver qué gastos se pueden eliminar o reducir. En lugar de salir a comer varias veces a la semana, limitarlo a dos o tres al mes. Probar hacer ejercicio en casa o salir a correr alrededor de la cuadra en lugar de una membresía mensual al gimnasio. Crear pequeños ahorros para hacer grandes compras, como ropa, zapatos, minivacaciones y aparatos tecnológicos.
Gastar sabiamente
Si no puedes permitírtelo hoy, no vale la pena comprarlo. Una de las mejores maneras de evitar gastar de más o gastar dentro de las posibilidades es crear un presupuesto. Un presupuesto mensual te permitirá revisar tus ingresos, concentrarte en abordar tus gastos y ver si tienes tiempo para disfrutar. Hay algunas ideas que debes tener en cuenta al comenzar a crear un presupuesto o nuevos hábitos que quizás quieras incorporar:
Hacer un seguimiento de tus gastos: anota todo en lo que gastas tu dinero. Ya sea en una aplicación, una hoja de cálculo o un bolígrafo y papel, hacer un seguimiento de tu dinero te ayudará a saber a dónde va.
Eliminar los gastos innecesarios: hay algunas suscripciones o servicios que quizás estés pagando pero que ya no usas. Es hora de cancelar y reasignar ese dinero.
Cambiar de plan de teléfono: en lugar de tener el teléfono más nuevo o un plan de teléfono mejorado, cambiarlos por uno más económico puede ayudarte a ahorrar dinero.
Refinanciar el auto o la hipoteca: puede ahorrar dinero extra si encuentras una mejor tasa para tu hipoteca o préstamo para el auto.
Pagar la deuda antes de tiempo: antes de agregar fondos adicionales a tus ahorros, ve si puedes intentar asignar más dinero a tarjetas de crédito, préstamos estudiantiles y otras deudas para poder pagarlas antes.
Regla 50/30/20: si necesitas ayuda para crear un presupuesto, intenta seguir la regla 50/30/20 para administrar tus ingresos: 50% para lo esencial, 30% para extras y 20% para ahorros y deudas.
¿Por qué es importante dar?
Pensar en el dinero y administrarlo deja a muchas personas estresadas. Se encuentra entre las cinco principales razones de divorcio en los Estados Unidos. Puede que te sorprenda, pero dar parte de tu dinero a organizaciones benéficas después de hacer un presupuesto puede ayudar a aumentar la felicidad y tener efectos duraderos en tu bienestar general. En un estudio de 2018, los psicólogos descubrieron que cuando las personas dan con frecuencia, su alegría dura más. Lo opuesto también fue cierto. Los participantes del experimento que dieron menos experimentaron una disminución de su felicidad con el tiempo.
Ya sea que decidas donar para una conexión personal con una causa que te importa, para apoyar proyectos y brindar apoyo a la comunidad o para aumentar tu felicidad, tus donaciones caritativas irán más allá de la bondad y te ayudarán a sentirte menos inclinado a gastar de más.
Fuentes:
https://www.merceradvisors.com/insights/personal-finance/the-benefits-of-charitable-giving/
https://www.usatoday.com/money/blueprint/debt/average-american-debt-statistics/
https://journals.sagepub.com/doi/abs/10.1177/0956797618814145?journalCode=pssa
https://www.forbes.com/advisor/banking/savings/why-is-it-important-to-save-