Las garrapatas chupadoras de sangre plantean importantes riesgos para la salud esta primavera.
Las garrapatas son arácnidos diminutos que se enganchan a los huéspedes, incluidos los humanos, las mascotas y la vida silvestre, y portan una serie de patógenos para varias enfermedades. Por ejemplo, en 2019, los departamentos de salud estatales y locales informaron a los CDC 50,865 casos de enfermedades transmitidas por garrapatas. Las garrapatas prosperan en ambientes boscosos, herbáceos y húmedos. Las enfermedades más comunes transmitidas por garrapatas incluyen la enfermedad de Lyme, el síndrome de Alfa-gal, la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas y la anaplasmosis.
Más de 34,000 personas dieron positivo en anticuerpos IgE alfa-gal en Estados Unidos durante 2010-2018.
Conozca a su garrapata
La enfermedad de Lyme está causada por la bacteria Borrelia burgdorferi y se transmite principalmente por la garrapata de patas negras (Ixodes scapularis). Los primeros síntomas son fiebre, dolor de cabeza, fatiga y una erupción cutánea característica en forma de diana. Si no se trata, puede dar lugar a complicaciones más graves que afectan a las articulaciones, el corazón y el sistema nervioso.
El síndrome alfa-gal (SGA), también conocido como alergia a la carne roja, está provocado por la garrapata de la Estrella Solitaria (Amblyomma americanum). La picadura de esta garrapata puede inducir una respuesta inmunitaria al alfa-gal, un carbohidrato que se encuentra en la carne roja. Los síntomas incluyen urticaria, problemas gastrointestinales y, en casos graves, anafilaxia.
La fiebre maculosa de las Montañas Rocosas es transmitida por la garrapata americana del perro (Dermacentor variabilis), y puede causar fiebre, dolor de cabeza y erupción maculosa. Si no se trata rápidamente con antibióticos, puede provocar complicaciones graves que afecten al corazón, los pulmones y los riñones.
La anaplasmosis es transmitida por la garrapata de patas negras y la garrapata occidental de patas negras (Ixodes pacificus). Los síntomas incluyen fiebre, dolores musculares y fatiga. Los casos graves pueden provocar insuficiencia respiratoria o insuficiencia de órganos vitales.
Prevención
- Llevar camisas de manga larga, pantalones largos y calzado cerrado.
- Utilizar ropa que repela las garrapatas y/o permetrina.
- Aplicar repelentes de insectos aprobados por la EPA.
- Realizar controles periódicos de garrapatas.
- Mantener el paisaje a salvo de garrapatas.
Tratamiento de las enfermedades transmitidas por garrapatas
Aprende a quitarte las garrapatas si encuentras una en tu piel. Una detección rápida es crucial para un tratamiento eficaz. Si experimentas síntomas después de una picadura de garrapata, consulta con un profesional de la salud rápidamente para obtener un diagnóstico y un tratamiento adecuados. La mayoría de las enfermedades transmitidas por garrapatas pueden tratarse con antibióticos si se diagnostican a tiempo.